Respuesta sobre la situación actual de las personas migrantes y de las administraciones estatales al respecto:
Estimados hermanos en Cristo.
Antes de nada, quisiera agradeceros el esfuerzo que están realizando desde la archidiócesis de Madrid para buscar una respuesta a tantas personas que llegan de lejos para buscar una salida y un lugar.
Ya hace casi 8 años aproximadamente ("Encuentro Madrid" con José Luis Pinilla o durante la visita de Rufino como delegado de migraciones a la Misión Emmanuel) desde nuestra comunidad Misión Emmanuel ya avisamos de que la autentica respuesta a estos hermanos, no era el crear instituciones o más infraestructuras, sino que éramos nosotros. En estos diez años de convivencia y de hacer comunidad con los más vulnerables, ratificamos esto. Los grandes esfuerzos realizados por nuestra familia católica, han dado frutos, pero insuficientes y parciales o superficiales. Nuestros gobiernos se muestran como títeres de una agenda globalista, muy lejos de la verdad y de la realidad de cada día . Las instituciones de la Iglesia como Cáritas, SERCADE etc.. y otras muestran una forma de trabajar poco diferente a otras que nos derivan a personas y familias,cuando ya no pueden percibir más beneficios económicos por ellos. Lo primero para la institución es salvar sus puestos de trabajo y el propio sostenimiento. Y ya nos dijo nuestro hermano mayor: "El asalariado, el que no es el pastor ni el dueño de las ovejas, huye y abandona las ovejas cuando ve venir al lobo, y el lobo las arrebata y las dispersa"San Juan 10:11-15. Aunque estas instituciones están formadas por hermanos con muy buena gente y con mejores intenciones.
No pretendemos dar lecciones de nada, pues "unos siervos inútiles somos", pero si nos ponemos a vuestro servicio para dar testimonio de que es posible ser respuesta para nuestros hermanos, cada uno con sus tiempos y dones, pero haciendo comunidad con quien nos necesita y necesitamos de ellos por igual, ya que solo en ellos podemos tener un encuentro con el en nosotros, concretando nuestra rica espiritualidad en frutos de los que muchos pueden comer. Aquí la institución católica puede hacer mucho, estimulando, acompañando, coordinando y confiando (sin controlar)a personas que quieran vivir la "consagración natural" desde su realidad, compartiendo en comunidad una entrega total a Dios en el hermano. Muchos buscan hoy el sentido de sus vidas y no hay otro que el de vivirlas en abundancia, como Jesús nos enseñó. Trascendiendo leyes y cumplimientos para ser auténticos. Esto entraña riesgos que pocos pueden asumir sin un respaldo de nuestra amada Iglesia.
Podemos realizar encuentros donde proponer estilos de vida cristianos en comunidad y talleres para poner en marcha estas comunidades, si contamos con el apoyo de la "comisión para la comunión eclesial" de la Archidiócesis de Madrid( Padre Antonio, Pedro Jesús...)
No tengamos miedo de confiar, de rasgar el tejido viejo, pues todo esto es para bien.
Nos ponemos a vuestra disposición, en obediencia al que "ES" en nosotros y vosotros.
Pidiendo perdón por nuestra necedad, que es mucha, si hiere a nuestros hermanos, sabiendo que no es intencionado. El Espíritu nos quema y nosotros gritamos, aunque casi nadie escuche.
Dios os bendiga.
