Tras unos cuantos años en esto de la acogida y mas de un año viviendo entre hermanos acogidos que provienen de África, hemos podido vivir las consecuencias de esta oportunidad tanto para el acogido como para el que acoge.
La responsabilidad que tenemos en este trabajo no es pequeña y en estos tiempos puede determinar el futuro de muchos tanto de aquí, como de allí.
Lo primero que tenemos que ten claro es que la acogida es bidireccional. El que acoge también tiene que ser acogido en el corazón del acogido, esto es a través de la confianza que el acogido pone en quien le acompaña y si no es así, la cogida no es del todo acogida.
El acogido tiene que tener claro a que atenerse, cuales son los objetivos, normas y actividades que se realizan en la organización o familia que le acoge. Esto les da mucha seguridad y al cumplirse con el tiempo, confianza.
El objetivo principal es la persona y el acompañamiento y la presencia es fundamental. Una acompañamiento que estimule y no anule a la persona, ya que el último objetivo es la independencia y la cogida algo limitado en el tiempo.
LA RESPONSABILIDAD ES TAMBIÉN CON LA SOCIEDAD.
Lo mas fácil para anular al acogido es hacerle dependiente y lo mas fácil a su vez para hacerle dependiente es anular las consecuencias de sus propias acciones, me explico, el acogido no debe ser un sujeto pasivo de los cuidados de los que le acompañan por muy roto que llegue y desde el principio. Según sus características, tendrá que involucrarse en su propia acogida de forma progresiva.
Pues el fin de la cogida primero es reparar daños, pero sobretodo es relanzar a los acogidos hacia la normalidad y no hay normalidad si no afrontan la realidad desde el principio, hablo de la acción-reacción del acogido dentro de la casa. Ejemplo: Si el acogido se ha comprometido a una actividad de formación y no asiste a las clases, debe ser advertido de su falta y aceptar las consecuencias si persiste dicho comportamiento.
El PATERNALISMO puede hacernos ver a los acogidos como discapacitados y un mero receptor de nuestros cuidados, en vez de involucrarle en los mismos, anulando así su capacidad. Ejemplo: Tras no asistir a las clases de forma reiterada, se van aceptando todo tipo de excusas o nosotros las ponemos por el.....Es su cultura...Está muy afectado etc...
El paternalismo es la inercia de una caridad mal entendida, el el camino fácil, es querer quedar bien con ellos, sentirnos buenos.
Tampoco podemos ser autoritarios y actuar con independencia del acogido, aquí el dialogo y la escucha es crucial. Sobretodo escuchar, no solo lo que dice el acogido, sino lo que hace día a día. Si aprovecha o no los recursos de los que dispone y si se adhiere al itinerario acordados entre ambos.
El proceso de inclusión no puede ignorar la realidad del acogido, pero el acogido tampoco puede ignorar la nueva realidad en la que ahora vive y que le va ha exigir mucho para conseguir su objetivo. Esta exigencia la debe empezar a vivir en la propia casa de acogida de forma gradual para facilitarle la que luego le pedirá la sociedad.
NO HAY DERECHO SIN DEBER
Lo que a nosotros nos parece algo normal, al que llega con unas perspectivas irreales, a veces llenas de fantasías que han visto en la TV, puede ser difícil de entender. Ellos tienen muchas necesidades y en África esperan su ayuda, aquí la mayoría tiene casa, un coche, muchos incluso varios.... El dinero casi llueve del cielo según la percepción de algunos. Pero la realidad es que ellos no podrán trabajar hasta pasados tres años y el que eviten el error del dinero fácil .... Aparcar coches, pedir en la puerta de un supermercado.... (Aunque sea una miseria, para ellos es lo suficiente para poder ayudar a los suyos) Está en nuestras manos.
El deber de cumplir con sus responsabilidades a nivel legal y como ciudadanos es también algo que hay que explicar, aunque sepamos que esta sociedad no es responsable ni cumple el deber que tiene con ellos y hacer lo contrario no les ayudará nada.
Incluso si se puede hacerles entender el compromiso que tienen a nivel de colaboración social, pues con ellos se está colaborando.
A veces ellos tendrán que elegir entre nuestro proyecto u otro, incluso seguir por su cuenta y es que no tienen que quedarse en nuestro proyecto, si o si. A veces necesitan un cambio y tomar otra perspectiva o simplemente aprender como todos, por ensayo y error.
ACOGER ES UNA GRAN OPORTUNIDAD PERO TAMBIÉN UN RESPONSABILIDAD para todos y de lo acertado d e nuestra respuesta dependerán el futuro de muchos. La sociedad los necesita, ellos nos necesitan y si creemos en ellos, los vemos capaces, solo necesitas una oportunidad o varias.... Como todos.
Daniel Almagro.
